Hoy día 23 de abril se celebra la fiesta de los Comuneros conmemorando el aniversario de la batalla de Villalar de 1521, en la que las tropas imperiales de Carlos I de España y V de Alemania vencieron a los comuneros.
El origen de la rebelión del pueblo castellano vino dado porque el joven Carlos llegó a Castilla con 16 años, sin hablar castellano a pesar de haberle puesto profesores de esta lengua y rodeado de su propia corte de extranjeros, a los que no tardó en otorgar suculentos sueldos y privilegios, lo que irritó aún más a los castellanos, que ya estaban molestos con la actitud de un rey que despreciaba la lengua y los modos castellanos y que parecía interesarse solamente por los impuestos de Castilla.
Aunque cayeran terriblemente derrotados, no se conmemora su derrota, sino el sacrificio y el honor de los comuneros que lucharon por su patria y por su pueblo.
Los Comuneros fueron unos de los últimos representantes de la rebeldía ibérica. Aquellos patriotas que pusieron por encima de nobles y reyes a su tierra y a su pueblo como nosotros ponemos a España por encima de los corruptos políticos.
Por eso nosotros nos identificamos con ellos y seguimos el ejemplo que nos dieron de luchar hasta el último aliento, aunque existan ahora grupos de extrema izquierda que auto proclamándose comuneros, pretendan ser el legado de aquellos y vayan con banderas moradas que nunca fueron comuneras y con una estrella roja que nada tiene que ver con estos valientes héroes.
Por supuesto, tampoco queremos desmerecer al Emperador Carlos I, ya que durante su reinado contribuyó a engrandecer España, y se lograron gestas como las de Hernán Cortés.
